—Encabeza un acto con tres gobernadores...
—La presidenta de la Nación quiso hacer un acto muy federal. La obra se anuncia en Buenos Aires, pero empieza acá y nos pidió y les pidió a los gobernadores que aquí estuvieran.
—La prolongación del contrato de dragado y balizamiento desde Santa Fe hacia el norte es una obra de mucha importancia.
—Es muy significativa para la región y para el país porque hoy la Argentina va a tener cada vez más el desafío de ser competitiva. Está claro que tenemos un lugar estratégico como productora de alimentos; alimentos con cada vez mayor valor agregado, como ocurre en la zona aledaña al Puerto de Rosario, pero, si hay un ámbito en el cual nos falta la suma de valor para ser más eficientes, es en el transporte. Está probado que el transporte a través de la hidrovía es muy económico, no contaminante, que genera la posibilidad de un control muy eficiente y también la de establecer vínculos regionales con los países hermanos de la región. Para nosotros es una obra muy, pero muy importante.
La vuelta del tren
—¿Y viene de la mano de los anuncios sobre reactivación del Belgrano Cargas?
—El Belgrano va a tener dos alternativas. Una es en Rosario, por eso la obra central es el ramal de Salta a Barranqueras y Aviá Terái- Rosario. Hay dos obras en la provincia de Santa Fe hoy en marcha sobre ramales del Belgrano, uno cerca de Coronda y otro, más al norte, con áreas de casi 150 kilómetros de vías nuevas, algo inédito en los últimos años en el país. La otra alternativa es transformar en un punto multimodal de transporte el puerto de Barranqueras donde Ricardo (por Luján) ha trabajado tanto en la recuperación de esa vía. Entendemos que, con esas dos alternativas, el ferrocarril pueda ir definiendo con su carga en qué lugar le resulta más eficiente bajar. La Argentina tiene hoy el 96 % de transporte por camiones, un 3 % por ferrocarril y el 1 % por hidrovía. La apuesta de esto es ampliar la matriz de transporte del país.
—Datos del Indec dicen que la gran mejora de los servicios está impulsada por la fuerte suba del transporte de granos...
—Es el mecanismo que tuvo la Argentina para poder superar esquemas de producción muy altos sin otra alternativa. Por eso la importancia de esta obra (con referencia al dragado), que implicará tres años de trabajo, durante los cuales, progresivamente, la gente va a encontrar una mejora en la navegabilidad para venir con producciones más del norte. Esto, más el ferrocarril Belgrano Cargas, nuestra red vial con el Estado compenetrado y la mejora en la prestación eléctrica, hará que el NOA-NEA deje de ser una promesa para convertirse una zona de altísima nivel de producción.
—¿Cuánto tiempo demandarán los trabajos en el Belgrano?
—El Belgrano tiene para muchos años. Las obras actuales en marcha son de 18 meses; después, vienen los créditos de CAF por 400 millones de dólares y, luego, las inversiones chinas que firmamos con la presidenta por muchos millones de dólares. El Belgrano es un ferrocarril que va a estar en obras no menos de cuatro o cinco años para poder traer la carga con una velocidad comercial aceptable para ser competitiva, una velocidad comercial segura y de 50-60 kilómetros por hora en una estructura de vías que nos permita volver a recuperar el segundo anhelo de los pueblos de por aquí, que es el que ferrocarril de pasajeros funcione.
—En esta ciudad hay mucha expectativa por la vuelta del tren de pasajeros...
—Tenemos tres proyectos. El primero es el Santa Fe- Recreo; el otro, de Santa Fe a Laguna Paiva, y el tercero es un sueño, pero que tenemos todos aquellos a los que nos gusta el ferrocarril, que en el marco de la recuperación del Belgrano es unir la estación central de Córdoba con Santa Fe. Hay que habilitar el tramo que une San Francisco-Santa Fe que tiene problemas graves, dos puentes caídos. Lo recorrí a pie. Mis abuelos eran maquinistas del Belgrano y algo conozco. Para esto necesitamos otros recursos, pero es un ferrocarril que puede puede integrar mucho, desde el punto de vista urbano, a la ciudad de Santa Fe.
—Y eso, ¿está en carpeta o en sueños?
—La Argentina se había quedado sin trenes. Hoy estamos volviendo a tenerlos. Hay una agenda enorme, mucho más grande que los recursos con que contamos. Yo les pido a los diputados, de todos los partidos políticos, que apoyen los proyectos ferroviarios. No son los proyectos de este gobierno, son los proyectos del Estado que necesita volver a tener ferrocarril.
—El Belgrano, ¿seguirá en manos del Estado?
—Sí, el Belgrano pasa a ser gerenciado por el Estado con dos sociedades, por un lado, la administradora de Infraestructuras Ferroviaria, y por el otro, la operadora.
—Hoy, el Estado, ¿tiene vagones en desuso?
—Estamos viendo cómo podemos hacer, tenemos mucho equipo muy usado para ponerlo en valor y transferirlo.
En el norte de Santa Fe el proyecto es que la recuperación de Sefecha (la empresa chaqueña) llegue a lugares de esa zona santafesina.
—La provincia también tiene talleres ferroviarios...
—Laguna Paiva está funcionado. La Secretaría de Transporte está por sacar una licitación pública para recuperar muchos vagones y coches y, seguramente, habrá trabajo para esos talleres. Que sabemos que es importante porque hay pueblos ferroviarios que dependen de esos talleres.
—¿Hay proyectos para el transporte de pasajeros de larga distancia?
—Primero tenemos que recuperar las vías.
Puerto
—¿Cuál es su opinión sobre el proyecto de traslado del Puerto local?
—Este es un tema del cual podría hablar más Luján. Para nosotros, hoy lo que tenemos de manera importante es que la recuperación de Santa Fe tiene que ver mucho con la recuperación de su Puerto, como nodo de actividad. Creo que Santa Fe durante mucho tiempo quedó como escondida. Esta vinculación con Córdoba, su puerto pujante, los créditos del Fonplata, van a ayudar a la mejora de este puerto y esta obra lo apoyará de manera significativa.
Acuerdo con China
—¿Y el aporte chino para el tren?
—Para el Belgrano Cargas es un precontrato firmado de 2.400 millones de dólares de inversión en vías -responde Schiavi.
/// EL DATO
Los subsidios del transporte de pasajeros
—En el interior siempre nos quejamos de la discriminación en los subsidios para el transporte de pasajeros.
—Estamos tratando de federalizar los subsidios, hacerlos un poco más equitativos. Hay una relación injusta entre el interior y la Capital, pero que empezó así y siguió así. Desmontar eso no es fácil. La red urbana de colectivos de Capital y Gran Buenos Aires es muy grande; tiene más de 17.000 colectivos. Subsidios tienen todos. Hemos firmado una resolución última por la cual el 15% de lo que llega a las provincias, éstas pueden determinar qué se privilegia. Está claro que tenemos dos problemas en Santa Fe: uno el que tiene todo el país, con valores de boletos más altos que en el área metropolitana; el subsidio es menor y no hay más margen de aumento. Por otro lado, los colectivos de más de 70 kilómetros que son un problema, y que tanto a Santa Fe como a Córdoba los complica mucho y estamos trabajando para poder resolverlo. Estamos en los temas. Es un problema general que tenemos con la cuestión tarifa y subsidio. Estamos en el área metropolitana organizando el Sube para controlar los subsidios, para pagar lo que corresponde, tentativamente yendo a subsidiar la demanda y no la oferta, y es un sistema que nos gustaría federalizar.
—¿Debe ser difícil desmontarlo?
—No es fácil hacerlo de un día para el otro. La decisión es a través del Sube, de ir ordenando, mejorar el recurso, adónde va, y en la medida de lo posible, federalizarlo cada vez más.
Fuente: El Litoral
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