El tren eléctrico que en su primera etapa unirá Maipú con Ciudad estará listo con suerte antes de fin de año, según afirmaron desde el Ministerio de Infraestructura. Los trabajos de limpieza y reconstrucción del tendido férreo comenzaron en marzo de 2009 y estaba previsto que fueran concluidos en doce meses, pero el retraso en la compra del material rodante y la decisión de prever la colocación de un tercer riel –para adaptar la trocha al tren de alta prestación– alteraron los plazos originales.

La UTE adjudicataria de la obra realizó primero la limpieza de las vías, luego emprendió la tarea de levantar todo el tendido desde la estación Gutiérrez, en Maipú, hasta la calle Pueyrredón, en Godoy Cruz, y actualmente encara la reconstrucción del tendido.
Concretamente, ya se ha colocado el balasto (piedra que sirve de base para colocar durmientes y rieles) en casi la totalidad del trayecto de 12,5 kilómetros entre Maipú y Ciudad y se han reconstruido tres kilómetros de vías. En el rearmado de la estructura se achicó el ancho de trocha de 1,676 a 1,435 metros para que puedan circular los trenes eléctricos.

Este cambio generó la reacción de los ferroviarios que luchan para que vuelva el tren de pasajeros a Mendoza, ya que éste usa trocha ancha y el Metrotranvía usará la mediana. “Por eso, en noviembre del año pasado decidimos colocar durmientes más largos para que se pueda colocar un tercer riel. Esto generó una importante demora en el plan de trabajo original”, explicó Mariano Pombo, subsecretario de Obras Públicas. “Trabajamos para que todo esté listo a fines de este año; ese es el objetivo”, agregó el funcionario.
Material rodante usado y nuevo
Otro asunto que influyó en el no cumplimiento del plazo de ejecución es la adquisición del material rodante. Es que la UTE Ceosa-Sogesic no ha podido avanzar aún en la construcción de los 16 paradores que está previsto se levanten porque su diseño depende del tipo de unidades que el Gobierno termine comprando.
Según contó Pombo, el Ejecutivo decidió que adquirirá 11 triplas usadas. Cada una constituye una formación de tres vagones con capacidad para 150 personas y podrían llegar desde Estados Unidos o bien desde Alemania. El funcionario explicó que falta aún que una de las empresas presente su cotización para tomar la decisión final. Si bien prefirió no dar el valor de las unidades, sí aclaró que salen 80% más baratas que las nuevas, cuyo costo es de unos U$S2 millones cada una.
Aunque el Gobierno ya solucionó el problema de los durmientes y tiene casi lista la compra de las unidades, debe todavía cerrar un asunto no menor: convencer al intendente de Capital, Víctor Fayad, de que el paso del tren no alterará el tránsito al pasar por calle Belgrano. Hasta ahora no lo han logrado y el radical insiste en que el paso sea subterráneo.
Fuente: Diario Uno
No hay comentarios:
Publicar un comentario