Paradores con vidrios rotos y todos pintados, ataques con piedras a las duplas y al Puesto de Control Central (PCC) son los principales problemas que hoy tiene el sistema del Metrotranvía.
“Estamos trabajando muy fuerte en seguridad con cámaras y la policía tranviaria, pero aún así nos tiran piedrazos. Hay ahí una problemática social, que es adonde apuntamos para prevenir y detectar irregularidades”, manifestó el secretario de Transporte, Diego Martínez Palau.
Agregó que “se cambian los vidrios, se pintan los paradores, pero los vuelven a dañar. Y a partir de ahora es el Estado el que se tiene que hacer cargo de las reparaciones, porque la obra ya está entregada, y esto tiene limitaciones porque el presupuesto no es ilimitado”.
En este sentido, los que más sufren el accionar de los vándalos son los paradores de Godoy Cruz y Luzuriaga. El funcionario destacó que más allá de los daños que se puedan producir, “el hecho de arrojar piedras a las duplas es peligroso para los propios pasajeros que viajan, que pueden resultar lesionados”.
Para controlar todo esto, el sistema, en sus 13 kilómetros de recorrido, cuenta con 105 cámaras funcionando, de las cuales 15 son domos que tienen una longitud de cobertura de hasta 500 metros y una posibilidad de giro de 360°.
Todo esto se controla desde el PCC que, ubicado a escasos metros de la estación Luzuriaga, también fue víctima del vandalismo y debieron enrejarle todas las ventanas.
Igualmente, Martínez Palau destacó que, si bien se encuentran con este nuevo problema, hoy el respeto para el Metrotranvía de parte de los automovilistas y peatones mejoró mucho. “Esto se debe en principio al sistema de onda verde con el que cuenta desde la intersección de Giol hasta Pedro Molina. Y ahí, a pedido de la Municipalidad de Capital, sobre Belgrano funciona como un vehículo más, respetando los semáforos”.
El Gran Hermano
Diario UNO accedió al PCC del Metrotranvía. Allí se controlan los 13 kilómetros de recorrido de las duplas, la onda verde de los semáforos, la seguridad de las vías y las 105 cámaras que se encuentran operativas y que pronto serán 136.
Está dividido en dos partes. La primera es la que controla todo el tranvía, los cruces de calle, las subestaciones transformadoras, los tiempos, si tiene algún problema, y hasta se ve en tiempo real por dónde está circulando la formación.
La segunda parte es un Centro Especial de Operaciones (CEO), equipado con el sistema Tetra de la policía, encargado de coordinar a la unidad especial creada especialmente para brindar seguridad a las duplas que también cuenta con geoposicionamiento.
“El estándar de seguridad que tenemos está por arriba de lo que exige la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) para los sistemas ferroviarios de Buenos Aires, porque acá tenemos integrado seguridad, comunicaciones, energía y semaforización. Todo en el mismo centro”, resaltó Martínez Palau.
Añadió que “acá queda todo registrado digitalmente, desde las filmaciones en conjunto con las órdenes que se dan desde el centro de control. Si hay un inconveniente tenemos la capacidad de respuesta inmediata además de conocer casi en tiempo real qué fue lo que paso”.
La idea es que con las siguientes etapas, a Las Heras primero y a Godoy Cruz y Luján después, se maneje todo desde el PCC que se instaló en Luzuriaga.
Fuente: Diario Uno, Mendoza
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