Infobae.com accedió a la presentación judicial que la empresa realizó ante el juez federal Bonadío. Asegura que "resultó indispensable" el cambio de lugar de los papeles tras la rescisión del contrato de concesión
Tras la decisión del magistrado que lleva adelante la causa por la tragedia de Once de encarcelar a tres directivos de TBA –el presidente, Carlo Michelle Ferrari, el gerente operativo, Darío Tempone, y el director de administración, Daniel Rubio– por "obstruir" la investigación, la empresa realizó una presentación para "aclarar" algunos puntos.
En el escrito, al que accedió Infobae.com, el apoderado de TBA, Carlos Alberto Lluch, recuerda que el motivo de la detención de los directivos "estaría vinculada con el manejo de documentación", lo que fue "indispensable" hacer tras la rescisión del contrato de conseción a la Unidad de Gestión Operativa.
"Al momento en que la Unidad de Gestión Operativa tomó posesión de la sede de TBA, resultó indispensable trasladar toda la documentación de propiedad de la sociedad a un lugar seguro a efectos de proveer a su custodia y conservación, no sólo a los fines a que hubiere lugar en relación con esta investigación, sino también con los requerimientos que puedan derivar del proceso concursal de TBA y a los fines de los reclamos pecuniarios que TBA tiene pendientes con respecto a su concedente, el Estado nacional", asegura el escrito elevado a Bonadío.
Asimismo, indica que "el traslado de la documentación propia de TBA fue consignada en todas las actas labradas en ocasión de la toma de posesión por parte de la Unidad de Gestión Operativa" del edificio ubicado en Ramos Mejía 1358, donde anteriormente se encontraba la sede administrativa de Trenes de Buenos Aires.
También afirma que al momento de entregar el inmueble a las nuevas autoridades y "teniendo en cuenta que TBA se quedaba sin lugar físico para poner a resguardo la documentación contable y societaria y para poder atender las consultas de los diversos tribunales, incluidas las relacionadas con la pericia contable que se desarrolla en esta causa" se labró un acta entre las partes y luego se "procedió a terminar con el traslado de aquella documentación".
Además, cita al Código de Comercio y la Ley de Sociedades Comerciales para recordar que "TBA no podía desprenderse de su documentación societaria y contable para dejarla en manos de terceros completamente ajenos a la sociedad, como son los nuevos operadores designados por la Secretaría de Transporte". Al respecto, destaca que tampoco "existía ninguna norma legal o reglamentaria ni orden de autoridad judicial competente, que hubiera impuesto mantener la documentación de la sociedad en aquel lugar que ya no quedaba bajo administración ni control de TBA".
Según la presentación, el traslado de la documentación al domicilio de Zelarrayán 5121 se realizó en "forma paulatina" y que además fue informado a Bonadío en un escrito "presentado el 29 de mayo de 2012". Luego da cuenta de las peripecias sufridas por los papeles, al no ser aceptados por el personal policial que custodiaba el edificio.
El apoderado precisa que las autoridades de TBA siempre estuvieron a disposición de la investigación y que "en ningún momento sus directivos o accionistas han puesto en riesgo la documentación contable ni han obstruido el accionar de la Justicia sino que, por el contrario, han colaborado en forma permanente con la investigación".
Al ser indagados por Bonadío, Ferrari, Tempone y Rubio negaron los cargos, dijeron que no ocultaron pruebas y que no tenían relación con la documentación contable. Por el momento continúan detenidos.
Fuente: Infobae
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