Nuevamente la pirotecnia mandó y fue prioritaria a la hora del festejo para los breñenses. La descarga saludando el año nuevo se inició a las 23.55 del 31 de diciembre de 2011 y finalizó a las 0.15 del 1 de enero de 2012, con veinte minutos sostenidos de disparos de cohetería, bombas de estruendo y bengalas luminosas.
Los pobres perros de Las Breñas, locos, desorientados, algunos encerrados haciendo destrozos y con sus tímpanos deshechos, vivieron un fin de año en el que la gente gastó fortunas en cohetes porque sin lugar a dudas fue el año en el que más pirotecnia se lanzó.
El espectáculo especial como todos los años lo ofreció a la comunidad transcurrida la primera hora de 2012 la empresa Recreo Pirotécnica en la Plazoleta del Cincuentenario Municipal monumento a Ferrocarriles Argentinos frente a la cual (San Martín y Mitre) se encuentra este negocio que cubrió de fuegos artificiales la histórica locomotora La Burgoise 1910 emplazada en ese espacio. Darío Hock, titular de la empresa, montó sobre la misma distintos tipos de baterías hasta en las ruedas de la máquina y su tender que al encenderlas daban la sensación de que las mismas giraban, disparando además por la chimenea y tolvas areneras, apoyadas por una seguidilla de fuegos artificiales lanzados desde la playa de maniobras de la estación en la misma dirección donde se encuentra emplazada la locomotora sobre la avenida San Martín.
Mucho público premió con su sostenido aplauso esta demostración de fuegos de artificio que ya fue incorporada al recibimiento del nuevo año y que además Recreo realizó como despedida del nonagésimo aniversario de Las Breñas. El espectáculo fue controlado por los bomberos voluntarios de Las Breñas, que vallaron el área de la locomotora realizando los controles de todo el campo de tiro en la zona de la estación de ferrocarril donde se lanzaron los fuegos artificiales.
Este año el que no saludó la llegada del nuevo 2012 fue el “Muñeco Piro” que se quemaba en la bocacalle de Azopardo y 25 de Mayo. Sus autores consideraron que después de cumplirse cuarenta y dos años de este acontecimiento vecinal -ya que el primero se quemó el 1 de enero de 1969- existiendo otra demostración es justo reconocer que el ciclo ha concluido y ya es historia, lo que no obsta que el tradicional Piro sea retomado en los próximos años por la nueva generación y vuelva a reventar.
Este muñeco siempre fue confeccionado artesanalmente y encendido en la misma bocacalle. Además de saludar el nuevo año, representaba el ya transcurrido quemándose con él todo lo indeseable para que se volatilice con las llamas y las explosiones dejando lugar a los buenos deseos y proyectos.
No hubo lesionados ni quemados por pirotecnia, pero sí por accidentes de tránsito. Ingresaron en la guardia del Hospital 9 de Julio lesionados y lesionadas al chocar dos motos y haberse caído las tripulantes de otra que fueron derivados al nosocomio público 4 de Junio de Presidencia Roque Sáenz Peña (los de la colisión) pero que no revisten gravedad.
Fuente: Diario Norte
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