sábado, 1 de octubre de 2011

La línea Sarmiento, otra vez al borde del escándalo

La detención de varios delegados sindicales derivó en un paro parcial que afectó a miles de usuarios. El gobierno dictó la conciliación obligatoria. La línea Sarmiento de los ferrocarriles del área metropolitana volvieron a constituirse ayer en la principal noticia del día cuando se ordenó la detención del líder de los delegados sindicales, Rubén Sobrero, y el sector lanzó un paro que afectó el servicio hasta que el ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria. La medida judicial forma parte de la investigación por la quema de vagones ocurrida el 2 de mayo en tres estaciones del ramal que vincula a Plaza Once (Capital Federal) con Moreno (oeste del conurbano). Junto a Sobrero, fueron aprehendidos el responsable de prensa del gremio, Leonardo Portorreal, y los dirigentes Rodrigo Peláez, Fernando y Guillermo Díaz. Desde julio, Víctor Damián Martínez y Alan Darío Skrobacki están en la misma condición. El juez interviniente, Juan Yalj --del fuero en lo criminal y correccional 2 de San Martín (norte del conurbano)--, los acusa por los delitos de asociación ilícita y estrago doloso. Para los investigadores, Sobrero --líder de la lista bordó, disidente de la conducción de la Unión Ferroviaria (UF), a cargo de José Pedraza--, sería el ideólogo de la simultánea quema de trenes en las estaciones Haedo, Ramos Mejía y Ciudadela. El grupo, que pasará el fin de semana entre rejas, recién será indagado el próximo lunes porque hasta entonces el magistrado no se reincorporará a sus funciones, debido a una licencia médica. Los trabajadores del Sarmiento, mientras tanto, lanzaron un paro, concentrándose a un costado de las vías en la estación Castelar con el apoyo de otros gremios no peronistas. También convocaron a una movilización para el mismo lunes con lugar y horario a definir. Aún está por verse, sin embargo, qué actitud seguirán ante la intervención de la cartera laboral. La conciliación obligatoria regirá por cinco días hábiles, hasta el viernes 7. La protesta tuvo el respaldo de los sindicalistas de la línea 60 de colectivos, del subterráneo porteño, de la empresa Kraft, del Ferrocarril Belgrano Norte y de la línea Mitre, junto al Polo Obrero y la Corriente Clasista Combativa (CCC). "Las detenciones forman parte de una campaña de funcionarios que tiene como abanderado al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, contra un modelo sindical combativo, que no se arrodilla", denunció el delegado Edgardo Reynoso, en conferencia de prensa. El abogado de Sobrero, Juan Carlos Giordano, aseguró que el arresto de su cliente se produjo a la madrugada, por parte de policías de civil que se presentaron en su domicilio y "lo golpearon" antes de meterlo en un auto para trasladarlo a la Superintendencia Interior, en Moreno 1440, de la Capital Federal. "Nos sorprende totalmente. Es una barbaridad hacerlo cargo a él y a los demás. Todo hace pensar que es una decisión política", añadió. El paro generó demoras en el servicio de la línea Sarmiento, pero no la suspensión total porque la directiva nacional de la Unión Ferroviaria, los maquinistas (La Fraternidad) y los señaleros no se plegaron. El expediente judicial intenta esclarecer lo ocurrido el lunes 2 de mayo cuando fueron incendiados una docena de vagones, en medio de graves incidentes por las demoras en el servicio. También hubo destrozos y saqueos en boleterías y andenes. Horas después, el gobierno denunció que se había tratado de un sabotaje porque los disturbios no fueron espontáneos, pero sin apuntar a Sobrero sino al diputado nacional Fernando Solanas (Proyecto Sur), que ese mismo día lanzaba su candidatura para la intendencia porteña y venía de presentar una película sobre el vaciamiento del sistema ferroviario. Ahora, en declaraciones a C5N, Aníbal Fernández fijó la postura oficial: * "La quema de vagones fue de un grado casi de alienación. No sólo rifaron 45 millones de pesos entre este hecho y otro sucedido en 2008 sino que al sacar bulones de la vías pudieron causar una tragedia." * "El artículo 14 de la Constitución garantiza a los ciudadanos el derecho a peticionar ante las autoridades, pero cuando yo viajaba en tren nunca me trasladaba con una mochila con explosivos." * "Hay que denunciar a los que atentan contra los que nos pertenece a todos. No me va a temblar la mano en firmar lo que haya que firmar contra este tipo de acciones. Queremos defender al Estado de la mejor manera." * "Nadie tiene ventajas o privilegios. Existe un hilo muy fino entre el artículo 14 (de la Constitución) que garantiza el derecho a peticionar y el 194 del Código Penal que asegura el libre paso o circulación. Ante esta duda, preferimos preservar el cuidado de las personas." Fuente: Lanueva

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