El paro de trenes provocó una gran congestión en autopistas y avenidas en plena hora pico, colapsadas por el ingreso de 300.000 autos más a la Ciudad. Los colectivos y las combis que ingresaron del conurbano circularon colmados de gente.
"La Policía ferroviaria sería la solución de fondo", sostuvo Omar Maturano en diálogo con Clarín.com
Si viajar por la Ciudad en hora pico nunca es una tarea saludable, hoy lo fue aún menos ya que, por la ausencia de trenes, 300.000 autos más se volcaron a las autopistas y avenidas. Durante varias horas, las vías vacías contrastaron con la locura que se vivió en las calles.
A raíz del paro ferroviario, todos los accesos a la Ciudad estuvieron en rojo, hasta que a las 11.30 llegó la buena noticia que anunciaba el levantamiento de la huelga en reclamo de mayor seguridad . El congestionamiento no lo provocó únicamente la mayor cantidad de coches que ingresaron esta mañana, sino el colapso de colectivos, combis y charters, que se vieron obligados a detenerse por más tiempo en las paradas para levantar pasajeros malhumorados y molestos que se apiñaban en filas larguísimas.
"De alguna forma se tienen que manifestar, pero nos complican a nosotros", le dijo a Clarín.com una joven que diariamente une Florencio Varela y la Ciudad con los trenes de la ex línea Roca. Hoy, para ir a la facultad tuvo que tomarse dos colectivos, lo que repercutió en más gasto y tiempo de viaje.
Una estudiante de Lanús coincidió con ella: "Tuve que salir bastante antes, ellos tienen sus derechos, pero nosotros también". Otra usuaria se lo tomó con un poco más de calma, "pedí permiso para llegar un poco más tarde y me lo dieron", contó mientras esperaba el colectivo.
Los accesos desde el Conurbano a la Ciudad fueron otro punto conflictivo durante gran parte de la mañana y sobretodo en la hora pico. En la zona Norte, el principal problema se generó en la autopista Panamericana al llegar a General Paz, donde el tránsito estuvo prácticamente detenido. En tanto, en la avenida Del Libertador, en todo el trayecto que recorre la ex Línea Mitre, las demoras oscilaron entre los 4 y los 6 minutos. Mientras que en la avenida Lugones, los autos también avanzaron a marcha muy lenta.
El panorama fue aún más caótico para los que entraban desde el Oeste. Liniers fue el punto más conflictivo . El tránsito en el cruce entre la autopista del Oeste y la General Paz estuvo taponado y la avenida Rivadavia, en toda su extensión, completamente congestionada por los pasajeros de la ex Línea Sarmiento que hoy debieron acudir a los colectivos. En las autopistas Dellepiane y Riccheri, las demoras alcanzaron hasta los 7 minutos.
Los que llegaban desde el Sur, se encontraban con retrasos de 20 minutos en la subida del Puente Pueyrredón y con una escena similar en el Vieytes, donde se avanzaba a paso de hombre. En tanto, en la autopista Buenos Aires-La Plata, y en los puentes Avellaneda, Uriburu y La Noria, las demoras superaron los 6 minutos.
Fuente: Clarin
No hay comentarios:
Publicar un comentario