Hace quince años, Montecomán se quedó sin tren, sin prosperidad y sin fuentes de trabajo. Ahora clama por ayuda para no convertirse en un pueblo fantasma. Posibilidades. Historias. Hace 15 años en Monte Comán pasó el último tren, y con él se fueron la prosperidad, las fuentes de trabajo y, lo que es peor, los jóvenes. Sumido en una crisis económica profunda debido a la desaparición en 1994 de la actividad ferroviaria que tanto esplendor le dio al lugar, más la crisis agrícola provocada tanto por la salinización del agua como por los males conocidos del sector, el distrito Monte Comán clama hoy una ayuda para que nadie lo tilde más de “pueblo fantasma” y especialmente, para que su juventud no se vaya. Su gente no sólo pide ayuda sino que se ha organizado en una asociación (Pro Monte Comán) para intentar impulsar proyectos que le devuelvan los latidos al pueblo (ver aparte). Ya lograron tener una subcomisaría, que funciona en la restaurada estación del ferrocarril, y ahora están a punto de concluir la subdelegación de bomberos, que funcionará en el viejo galpón de carga. El día que el tren dejó de circular, más de 1.000 personas quedaron en la calle. Algunos de sus 4.000 habitantes buscan salir de debajo de las ruedas del tren e impulsan un desarrollo turístico al pueblo. “Pro Monte Comán surgió por ver tantas carencias, nos sentimos en algún momento discriminados por las autoridades nacionales, provinciales y municipales, nuestras prioridades fueron salud y seguridad. En seguridad obtuvimos algunos logros como la refacción de la estación del ferrocarril para que funcione la subcomisaría y en este momento estamos refaccionado el galpón de carga para el cuerpo de bomberos; en salud hubo pocas respuestas, sólo conseguimos que la guardia de ambulancia permanezca en el centro de salud pero no tenemos guardia médica permanente”, comentó Élida Sanoguera, presidenta de la asociación. Walter Torres, otro vecino que colabora mucho, añadió que “la idea es tratar de desarrollar el turismo porque tenemos claro que el turismo diario pasa por Monte Comán, la manera de que el pueblo empiece a crecer a nivel socioeconómico es atraerlo; infraestructura para pernoctar no tenemos pero sí tenemos para desarrollar circuitos turísticos, como agroturismo, turismo rural, histórico”. “Sabemos –agregó Torres– que una vez que no existe más el ferrocarril el pueblo muere y la agricultura es poco explotada. Los jóvenes cuando egresan de los colegios van emigrando por la simple razón de la falta de fuentes de trabajo. Hoy por hoy son pocas fuentes, hay más empleados del Estado”. Del bienestar rural tampoco quedan muchos rastros en este pueblo. Las empresas que alguna vez le dieron trabajo a gran parte de la población quebraron o se mudaron.
Rolando, el trabajo, la memoria
Conversar con él es revivir no sólo el pasado de Monte Comán sino la época de gloria de la actividad ferroviaria argentina. Escucharlo contagia pasión por el trabajo. Es que Rolando Morici, que trabajó desde los 17 años en los trenes, incluso se emociona cuando llega a la parte en donde esa gloria comienza a evaporarse, al igual que el humo de sus recordadas máquinas a vapor. Su origen ferroviario se remonta a la época de su abuelo, que llegado de Italia hizo trabajos en piedra en las ramas ferroviarias de Mendoza a Eugenio Bustos. “Antes hizo la estación de San Juan, trabajó en varias estaciones más hasta que llegó a San Luis y después se vinieron a hacer los puentes para acá, entre 1902 y 1903. Varios puentes de esos los puso mi abuelo y yo los saqué”, recordó con curiosidad Rolando. Rolando trabajó 43 años en el ferrocarril y llegó a ser jefe de los talleres. Es que sus conocimientos sobre mecánica de trenes es tan grande que incluso hace poco lo llevaron a Bariloche para reparar una formación del Tren Patagónico que nadie podía hacerlo. Nacido en 1933, estudió por correspondencia y cuando “cumplí 18 entré al taller ferroviario, eso sí que es trabajar”. Sobre el futuro de su Monte Comán querido señaló que “hoy la economía de un país está en el transporte ferroviario; si una empresa tiene que transportar 3.000 toneladas lo hace, para llevarlo en camiones se necesitan 100 camiones de 30 toneladas y ni hablar de consumo de combustible y muchísimas cosas más”. Rolando con sus 76 años es un libro abierto de historia ferroviaria. Una historia ligada a un pueblo que hoy intenta diversificarse para dejar de vivir de esos recuerdos. Proyectos e ideas para salir del estancamiento. Algunos vecinos tienen varios proyectos para lograr obtener fuentes de trabajo para la gente, sobre todo para que la juventud no emigre. Balneario: en el río Diamante entre el pueblo y el distrito La Llave hay una costa que se considera muy apta para convertirla en balneario. Los vecinos sólo piden una máquina que nivele las orillas. Alegan que el fondo del río en esa zona, sin piedras y con aguas calmas, es ideal para balneario. Pueblo histórico: en el plano turístico cultural, la gente quiere que se declare a Monte Comán pueblo histórico, valorando los bienes del ferrocarril y las casas que se construyeron en el siglo XIX y que aún se mantienen originales. Coto de caza: a 40km del pueblo hay un coto de caza en desarrollo. Si bien es privado los vecinos piensan que su éxito puede significar fuentes laborales para algunas personas. Deportes: poner otra vez en funcionamiento un circuito de motos y pelear por un polideportivo. Capacitaciones: piden que se den en el lugar distintos cursos de capacitación y oficios para dotar a los jóvenes de un arma para su adultez. Tenemos esperanzas Por José Antonio Montoya, profesor de historia y vecino. El distrito surge como un centro ferroviario muy importante a partir de 1908, rodeado de chacras y de fincas, en una extensión de 4.200 hectáreas. Y mantuvo esas características hasta el año 1980 en lo que hace a la agricultura. El ferrocarril se paraliza totalmente en 1994 cuando la empresa estatal pasa a depender de una entidad privada que cortó todos los servicios, lo que produjo graves problemas socioeconómicos, ya que prácticamente más de 1.000 personas quedaron sin trabajo y mucha gente tuvo que emigrar del distrito. Hoy podemos decir que tenemos un pueblo donde la mayor parte de la población son jubilados de más de 60 años y jóvenes de hasta 20 años aproximadamente, la clase activa es menor. Pero tenemos expectativas porque el día que se termine el paso Pehuenche todo el litoral y el centro del país va pasar por Monte Comán y General Alvear, lo cual le va dar vida al distrito. Otra de las esperanzas que tenemos es la construcción de Portezuelo, que permitiría llevar las aguas del Grande al Atuel y la zona más beneficiada sería la ubicada entre Real del Padre y Monte Comán. El agua que recibimos tiene elevada salinidad, lo que hace que las plantaciones no tengan la calidad suficiente. En sus orígenes, Monte Comán abarcaba los actuales distritos de Goudge, Real del Padre y sectores de La Llave al sur del río Diamante; esa zona se conocía como Monte Cuman por una estancia ubicada en Goudge llamada Los Amigos. Tendríamos que analizar de dónde los dueños escoceses tomaron el nombre Monte Comán, que significa monte del agua estancada.
Fuente: Diario Uno
yo pase por monte coman y es escalo friante de noche un dia viajando mi tia sola escucha que algien aruga un pápel de caramelo y ve hacia atras y no hay nadie, a me olvide de contar que iba con todas las ventanas cerradas porque hacia frio, entonces para la chata y no ve nada
ResponderEliminary sigue estonces para en la policia de san luis y la policia le dijo que no habia nadie mi tia se asusto y al llegar a su casa ve que no habia nadie entonces entra y ve que en la chata flota un papel de caramelo
poray no me crean no inporta hay onda
besos chau
Pienso que así como el ferrocarril fue la gran fuente de trabajo también produjo un efecto tremendamente nocivo en gran cantidad de personas, ya que se acostumbraron al empleo estatal, el cual no demanda gran esfuerzo ni inteligencia; esto produjo un acostumbramiento a lo fácil, al contrario del sector agrícola, el cual con grandes sacrificios PRODUCE genuinamente y es menoscavado. Es resultado se vió cuando se fue el ferrocarril: la mayoría no sabía hacer otra cosa y tampoco tuvieron habilidad ni capacidad de riesgo para emprender algo nuevo. De esta forma la mentalidad reinante es totalmente "chata" y negativa, debido a que los pocos emprendedores son blanco de comentarios mordaces y malintencionados. Realmente debería colocarse un monumento a la entrada que sería una lengua gigante! como la de los Stones. En definitiva me encanta mi pueblo..pero vacío jaja o solo con el 10 % de las personas, los que valen la pena. Espero vaya cambiando esta generación vieja y los jóvenes no repitan la historia cuando el pueblo vuelva a ser pujante. Andy
ResponderEliminarPibe...Ante tu manera de opinar sobre lo que es el ferrocarril y el concepto, voy a usar algunas de tus palabras. A tu conocimiento chato y negativo que tenes sobre el mismo, te digo que el ferrocarril es sinónimo de pujanza, trabajo, servicio, defensa de nuestra soberanía, grandeza, ETC. Entre los ferroviarios a los cuales llamas ignorantes, que no saben otra cosa, habían: técnicos en electrodomésticos, albañiles, electricistas, relojeros, ETC. Debes ser del 10% al cual te referís, que Menem les hiso creer que iba a pasar la atmósfera, estratosfera, y en cinco min. iba a estar en China...Sabes Stones? No vaya a ser que en un futuro sea el ferrocarril el que te dé de comer...ah, ¿a que te dedicas?, aparte de hacer los surcos en la tierra...Y seguí soñando con un pueblo y un país sin ferrocarriles, que vos vas a crecer mucho, estando en un pueblo sin ferrocarril.
ResponderEliminarQue bueno sería poder discutir esto. En mi flia el Ferrocarril fue muy importante, porque mi abuelo trabajó toda la vida allí. Las generalizaciones no son buenas, todas las personas son mas inteligentes de lo que uno cree. Para poder desarrollar esa inteligencia muchas veces va acompañado de un entorno pujante, que contagie esa energía.
ResponderEliminarHoy vivo en Inglaterra, aquí como en toda Europa el tren es importantísimo !!! ojala en nuestro país el tren vuelva a ser lo que fue y para eso debemos trabajar como sociedad, "unidos".
solo estuve 10 años en monte coman y te puedo asegurar que fueron los mejores 10 años de mi vida. el gran porcentaje de la gente es muy buena y de los otros hay en todos lados. no voy discutir nada con nadien y muchos menos con personas que se creeeenn.... mas que otros. desde villegas ´FUERZA MONTE COMAN´´
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